¿Alguna vez os habéis preguntado por qué nos cuesta tanto documentar o “empaquetar” un proyecto antiguo, incluso cuando sabemos que es necesario?

Llevo unas semanas en silencio preparando cosas nuevas, pero me he dado cuenta de que lo que me frenaba no era la complejidad técnica, sino la gestión de mi propia ‘RAM mental’…

Tengo código de hace meses que debería subir a un repositorio, pero mi cerebro genera una resistencia activa cada vez que intento ponerme. No es pereza. Es algo más estructural.

Analizándolo con mentalidad de sistema operativo, me he dado cuenta de que en mi cabeza corren dos procesos compitiendo por la CPU:

  1. El Explorador (Explorer.exe): Un proceso de alta prioridad optimizado para el “brillo”. Se alimenta de la dopamina de conectar nuevas ideas y diseñar arquitecturas. Su función es avanzar hacia la siguiente frontera. Para él, volver atrás es computacionalmente ineficiente.
  2. El Archivista (Archivist.exe): Un proceso en segundo plano (background) encargado de cerrar ciclos, documentar y limpiar. No genera dopamina, pero es vital para liberar RAM mental.

El problema es que el planificador de tareas (nuestro cerebro) siempre prioriza al Explorador. El miedo a perder el impulso de lo nuevo hace que veamos la tarea de archivar no como trabajo, sino como una interrupción. Y así, las tareas se “enquistan”, consumiendo recursos en segundo plano y generando esa sensación constante de “debería estar haciendo esto”.

¿La solución que estoy probando para hackear mi propio planificador?

  1. La Regla de los 5 Minutos: No intentar “hacer el proyecto”. Solo dedicar 5 minutos a localizar la clave o crear el repo. A menudo, la resistencia es al arranque, no a la ejecución.
  2. Reencuadrar el Valor: Dejar de ver el código antiguo como “obsoleto” y verlo como “arqueología del proyecto”. Es la prueba de origen que valida a dónde hemos llegado hoy.
  3. El “Commit” Imperfecto: Aceptar que documentar el pasado no requiere la perfección del presente. Publicar “lo que hay” es mejor que pulir lo que nunca verá la luz.

Comparto esto por si alguno más tiene al proceso Archivist.exe colgado y consumiendo recursos. A veces, la única forma de avanzar es parar cinco minutos para cerrar las pestañas mentales abiertas.